jueves, 11 de agosto de 2011

Los zapatos de la Ena


Los zapatos de la Ena
la acompañan de verdad
y ahuyentan su soledad
que le causa tanta pena.
Con una serenidad plena
evita los arrebatos
sabiendo que cuatro gatos
la eligieron senadora.
Es estoica esta señora
y se saca los zapatos.

2 comentarios:

  1. Pa que aprenda de Espinela
    Y no grite cual macaco
    yo lo metiera en un saco
    y lo mando pa la escuela

    le contesto yo al instante
    sin hacer extravagancia
    atrevida es la ignorancia
    y atrevido el ignorante.
    Si se dice usted un hablante
    d´este arte que aquí vuela
    yo le dejo una secuela
    solo pa que monte firme
    y un regalo antes de irme
    pa que aprenda de Espinela.

    Son sus rimas muy sencillas
    dígame quien le enseño
    creo que se la vendió
    claro en esto usted no brilla.
    si se toma o no a rencilla
    lo que escribo y le destaco
    creo que por desacato
    ahora usted debe pagar
    aprender para entregar
    Y no grite cual macaco.

    Sabe usted de nuestra historia
    Del sabere populare
    De vigilias y cantares
    Que viven en la memoria.
    Es obscuro como noria
    Y en su rima demoniaco
    Su dibujo dionisiaco
    No refleja poesía
    por mi yo lo botaría
    y lo metiera en un saco.

    Creo que se lo merece
    porque quiere progresar
    no hay que ridiculizar
    si de rimas bien carece.
    pues su camino entorpece
    el que enceguecido vuela
    si lo alto es lo que anhela
    no se vaya a equivocar
    no me lo vaya a topar
    y lo mando pa la escuela.

    Al fin doy la despedida
    y quemando cualquier leño
    salga el fuego que es el dueño
    de sus letras ya perdidas
    vaya mi rima sentida
    para el trato ir cerrando
    y mientras le voy hablando
    espero contestación
    me despido en la ocasión
    del Señor “Vamos Payando”.

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  2. Cree conocer del arte / y ha rimado infinitivos / sólo se manda las partes / y se ha pasado de vivo.

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